Ganada la elección municipal en Lima, Fuerza Social prometía un futuro político auspicioso, pero la decisión que ha tomado de cara a las presidenciales, no parece la mejor. El haber rechazado una alianza con Perú Posible, un partido ya ganador en los comicios presidenciales y con un candidato como el ex presidente Alejandro Toledo, puede ser un error político que definitivamente le costaría caro de aquí a futuro.
Se sabe que en la interna del partido se manejaron tres opciones. La primera de ellas era formar una alianza con Perú Posible, la segunda fue aliarse con los movimientos regionales “de izquierda democrática”, y por último también habían pensado en sólo presentar una lista congresal. Los 24 miembros del directorio del partido se inclinaron por la segunda y presentarán un candidato presidencial para las elecciones del próximo año, algo muy criticado por muchos y peligroso para el mismo partido. El haber ganado las elecciones municipales en la capital, no es un factor determinante para la postulación a las elecciones presidenciales, mas aún sabiendo que existen candidatos ya posicionados y que cuentan con la simpatía de miles de peruanos.
El lanzarse al ruedo de esta manera, sin un candidato decidido y preso para muchos, de la soberbia electoral, el partido Fuerza Social parece haber cometido un suicidio político al tomar esta decisión, en lugar de mantener su sitial y formar una alianza con un fuerte candidato a la presidencia, como lo es Alejandro Toledo. Lejos de la posición izquierdista del partido de Susana Villarán, debe primar el interés por el país, y lo menos que necesita el “mercado” electoral son candidatos que distraigan al votante de su responsabilidad de decidir el futuro de su propio país.
Candidatos menores, sorpresivos o “ladrones” de votos, puede significar un vez más una elección por el menos malo y una segunda vuelta eminente por la gran repartición de votos entre los que pugnan por llegar al sillón presidencial. El vicepresidente de FS, Jesús Coronel, argumentó que la decisión fue tomada para mantener el perfil de centro izquierda con el que cuenta el partido y no entremezclarse con el centro derecha (Alejandro Toledo) o la izquierda radical (Ollanta Humala).
Un riesgo político es el que asume el partido Fuerza Social al tomar esta decisión. Los principales contendores limeños de la futura alcaldesa Susana Villarán, se frotan las manos y auguran una victoria en su afán de hacerle oposición a la nueva izquierda de centro que se apoderará de Lima. El tiempo será el encargado de demostrar que lo mejor era formar una alianza con un candidato ya posicionado y seguir en silencio fortaleciendo un partido político con buen augurio para el futuro.